
LAS DOS HERENCIAS…
Ella vivía en un pueblito en la provincia de Buenos Aires que en sus mejores épocas llego a tener alrededor de 3000 almas reduciéndose hoy a solo 460 de las cuales el 60% son personas de mas de 70 años.-
(Una espiritual y la otra material,
cosas de la vida)
Cuando el padre de Joaquín falleció, le dejo como herencia y vaya herencia…
cuidar y ayudar a la que fue su compañera por mas de cuarenta años ya que
siempre decía que lo quería como al hijo que nunca tuvo.-
Ella vivía en un pueblito en la provincia de Buenos Aires que en sus mejores épocas llego a tener alrededor de 3000 almas reduciéndose hoy a solo 460 de las cuales el 60% son personas de mas de 70 años.-
A pesar de sentir un especial cariño por ella, no
se sabe porque Joaquín tomo esa responsabilidad ya que su madre, que gracias a
Dios aun vive, nunca se entero de sus escapadas a esa provincia para ayudarla
económicamente y siempre tener que hacerle alguna reparación a la casa,
como colocarle una membrana al techo, instalación del agua, algún
artefacto domestico, para que tuviera algunas comodidades y de esa manera pasar
sus últimos años de su vida tranquila, esto también provocó algunas discusiones
con su esposa que nunca entendió porque había tomado ese compromiso.-
Por otro lado y lamentablemente
como toda persona de su edad Elvira comenzó con sus achaques, tenía
diabetes sumándosele el mal de parkinson.
Cuando la conoció allá por los años '70 rondaba sus 35 años, era una hermosa
mujer, de pelo negro y grandes ojos, muy trabajadora y siempre colaborando con
su Padre y porque no acompañándolo en sus locuras, en una palabra creo que realmente
lo quiso mucho.
Al morir el padre de Elvira le dejo una hectárea de campo, lo que seria en una
ciudad una manzana, solo que cuando la Municipalidad comenzó a tomar
cuentas dichas manzanas comenzaron a ser loteadas y como no había documentación
alguna, pudo por lo menos comprar junto con su compañero cinco terrenos o lotes, o sea un
cuarto de hectárea con una precaria construcción, luego la ampliaron y al
hacerlo quedo ubicada el medio de dos terrenos.
Allí vivieron hasta el día en que se
despidieron de este mundo, primero el padre de Joaquín y hace unos días ella.-
Su hermana menor fue de un gran apoyo,
muy servicial, le hacia las compra, colaboraba con la limpieza de la casa
y sobre todo le hacia compañía a pesar que tenia que atender a su esposo del
cual su cuñada no le tenía mucha simpatía, esa era la sensación que
Joaquín sentía cuando la visitaba y caí él también de visita.
Los 10 años transcurridos desde la muerte de su
Padre, pasaron muy rápido, no ocurriendo lo mismo para el que espera; cuando
hablaba por teléfono con ella siempre le decía que se apurara en visitarla
porque un día no la iba a encontrar, eso no le preocupo nunca a Joaquín, pero
si cuando pensaba que por su diabetes algún día podía llegar de vista y correr
el riesgo de que no lo reconociera, eso sí le iba a doler.-
Para toda la gente del pueblo, Joaquín
era su único hijo y ella orgullosa así lo presentaba, cuando por
teléfono le avisaba que iba a ir a visitarla, claro la fecha nunca se cumplía y
así pasaban los días, semana y meses, hasta que se cumplió lo que ella le
venia diciendo, “un día vas a venir y yo no voy a estar”.
Se enteró de su fallecimiento
dos días después, porque la llamaba y no contestaba el teléfono, buscó el
numero de teléfono de un vecino que tenia anotado la última vez
que la vio y fue ahí cuando le dieron la noticia que de alguna
manera ya presentía, solo que a modo de no querer reconocerlo, tenía la
esperanza que por lo menos la hubieran internado y alcanzaría a despedirse de
ella como hubiese querido.
No asistíó a su velorio, ni a
su entierro, pudiendo viajar una semana después junto con uno de sus hijos,
para tomar cuenta de algunas de sus pertenencias, al igual que pudo tener
acceso a las que tenia guardadas de su Padre, viejas fotos, cartas y algunas
que otros recuerdos.
Conocíó al resto de su familia,
despidiéndola, todos gente de bien, donde la palabra vale mucho mas que un
documento y digo esto porque la noche anterior a su regreso se hizo una reunión
familiar dónde sus dos hermanas, aun vivas gracias a Dios y siguiendo los
deseos de la fallecida dejaban todo a su nombre, es decir Joaquín tomaría
cuanta de tres de los cinco terrenos mencionados junto con la casa de la cual
no existe escritura alguna, ya que dos de ellos se los había donado en
vida y estaban escriturados a su nombre.
Tomar esa nueva responsabilidad,
porque para dejar todo en condiciones necesitaba de tiempo y gastar un
dinero importante hizo que no durmiera parte de la noche pues al otro día debía
ir a una Escribanía y hacer todos los papeles correspondientes para que todo
sea legal.
La intención de Joaquín
era el de dejar unos casero en la casa para que no se terminara de deteriorar y
que tomaran cuanta de los terrenos, los mantuvieran limpios, cuidara de
las plantas de las que ella tanto gustaba y de los árboles frutales que algunos
ella plantó y que se encuentran dentro de los dos terrenos que son de él, o
alquilar la casa y ese dinero dárselos a su hermana que tanto la ayudo y
que a pesar de vivir a dos cuadras de la misma, junto con su esposo, la dejo
abandonada enterándose al igual que él que se encontraba en el
exterior, que hacia dos días que había fallecido (se
los podría justificar porque ellos actualmente a penas se pueden mover...)
Pero no fue así, todos
sus pensamientos y deseos quedaron en la nada, en el momento de firmar la
hermana que mas la visitaba junto con su esposo, aquel que su madre adoptiva no
le gustaba, no quiso hacerlo porque, por influencia del mismo, esos terrenos se
podían vender y sacar un buen dinero, por supuesto que primero se los
ofreció a Jaoquín para que los comprara, algo insolito, solo que se olvido que
para ello hay que hacer una sucesión y se necesita dinero y que las dos
hermanas para vender se tienen que poner de acuerdo, dando como resultado
el abandono de todo aquello, como hicieron con ella, al igual que
la Estación de Tren de la foto.-
Egoístamente pensó solo en él
porque necesitaba dinero para una operación de caderas, no dándose cuenta que
una sucesión demora y hay que tener dinero para pagarla. Si él hubiese sido
sincero, y menos codicioso, Joaquin lo hubiese ayudado; ahora
se entiende cuando Elvira decía que no quería que su cuñado se metiera en sus
cosas, que ni siquiera se le ocurrirá clavar un clavo, porque siempre embarraba
las cosas, que lamentable.-
Que tenga un buen viaje querida
"Elvira" con un pasaje en primera clase ya que se lo merece, ahora
está descansando en Paz junto a su ser amado como Usted quería, dentro de un par de
años nos encontraremos, todavía tengo algunas cosas que hacer.-